Hace dos décadas las comunidades alpaqueras de Arequipa y Puno advirtieron que la calidad de la lana de alpaca se reducía, los animales tenían más cerdas y la fibra que se obtenía era más gruesa. Poco o nada pudieron hacer al respecto, hasta que empresarios del sector decidieron ayudarlos a preservar la calidad de la fibra de sus animales a través del implante de embriones.
Pero el proyecto empezó desde cero hace dos años. Alonso Burgos, gerente de Pacomarca, el fundo de desarrollo alpaquero de Incalpaca, en Arequipa, recuerda que el trabajo avanzó lentamente, pues primero se debía establecer un banco de datos genéticos sobre la alpaca, en el que se registrara la ascendencia de cada animal. No solo debía consignarse quiénes eran sus padres, sino también la calidad de la fibra que estos producen o producían. Actualmente el banco de datos es el más grande del mundo.
El siguiente paso fue implantar embriones de los mejores animales. Para ello contrataron desde setiembre a expertos australianos, quienes trabajan desde hace una década en el mejoramiento genético de las alpacas que importaron a su país y ya han logrado el nacimiento de 2.000 ejemplares mediante esta práctica.
Burgos explica que el tratamiento es algo sencillo: "se selecciona al mejor macho y a la mejor hembra, es decir, los que producen la fibra más fina, para que fecunden los embriones. Luego se escoge a una o varias madres que recibirán estos embriones".
Después de que la hembra de fibra fina es fecundada por el macho se esperan 10 días para extraerle el embrión, que luego es implantado en una de las madres seleccionadas.
Dicho proceso se puede repetir hasta siete veces por cada animal, como se hace desde setiembre de este año, en que comenzaron a trabajar con 23 hembras de buena calidad de fibra. "Con esta técnica nos saltamos siete años del tiempo que deberíamos esperar para que la hembra más fina tenga crías nuevamente y luego estas se puedan convertir en machos reproductores si fuera el caso", afirma Burgos.
Los animales mejorados luego son entregados a las comunidades alpaqueras que les abastecen la fibra, donde también se realizó ya el trabajo de identificación de cada animal.
En el fundo de Pacomarca el trabajo no se limita a mejorar la calidad genética de los animales. También se busca mejorar todo el trabajo que se hace con estos camélidos, principalmente en su alimentación, que ya no está restringida a pastos andinos. Ahora también consumen avena forrajera.
Una calidad que ha venido decayendo
Dereck Michell, representante de Michell y Compañía, una de las tres grandes empresas de hilados de Arequipa, recuerda que hace dos décadas el 60% de la lana de alpaca que acopiaba era de la calidad 'baby'.
Hoy solo el 40% de los 5'000.000 de kilos que recoge la casa Michell y Compañía es de la fibra de esta calidad. Por ello dicha empresa ha instalado fundos en la sierra, donde se mejora genéticamente a la alpaca.
En estos fundos también se desarrolla nuevas técnicas de esquila, en ambientes limpios que permiten trabajar con la lana 'baby' o 'baby royal'.
Publication: El Comercio Online
Provider: El Comercio
Date: November 20, 2007 (07:49)
martes, 20 de noviembre de 2007
Mejoran la producción de la fibra de alpaca con implante de embriones
Etiquetas: Ganadería
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